CARACAS.- Los Caribes de Anzoátegui mostró otra actitud sobre el terreno de juego y en Caracas dio señales de vida al someter a Tiburones de La Guaira 8 rayitas por 5 con jornada de ensueño para Jonathan Herrera quien remolcó cuatro y actuación de altura del relevista Matt Palmer quien amarró a la toletería escuala.
Ante los conocidos problemas en el staff de abridores el mánager Marcos Davalillo optó por darle la pelota a José García quien pudo sacar los dos primeros episodios en blanco pese a los inconvenientes, siendo el segundo acto un claro ejemplo al dejar La Guaira hasta tres corredores en circulación.
Caribes picó adelante en la parte alta del tercero ante el zurdo Willie Collazo al ligar doblete de Javier Brito y sencillo remolcador de Herrera, diferencia que se esfumó de inmediato el ligar sencillo Gerardo Parra, boleto que negoció Luis Hernández y Alex Cabrera remolcó el empate con inatrapable a la derecha.
El juego representaba mucho para la novena indígena y por esa razón Matt Palmer entró a relevar de inmediato. Elevado de sacrificio de Rubén Mateo permitió la segunda anotación de La Guaira pero la entrada culminó cuando Óscar Salazar la rodó para doble play.
Caribes aprovechó las marfiladas de la defensa local para darle vuelta al marcador en el cuarto acto y después de un out. Lino Connell se embasó por pecado de Luis Hernández y enseguida Javier Brito soltó su segundo tubey de la tarde para colocar corredores en posición anotadora, situación que empeoró cuando John Rodríguez recibió pelotazo que lo sacó del resto de la semifinal.
La inspiración de Jonathan Herrera continuó y una línea bien colocada por la derecha, que se perdió en el bullpen salado, barrió las bases para voltear el resultado, 4-2, ventaja que jamás perderían. Nuevo error del campocorto Hernández ante batazo de Juan Francia dejó viva la entrada y Eliézer Alfonzo no desaprovechó la oportunidad para traer una más con imparable al jardín izquierdo.
La ofensiva oriental continuó ante un inefectivo Heath Totten en el quinto pisando el plato hasta en dos ocasiones y en el sexto un batazo de largometraje de Eliézer Alfonzo contra el joven Rubén Medina pusieron las cosas 8-2. Con la salida de Palmer vino la reacción de Tiburones en el último tercio del juego pero las cuatro carreras, dos ellas producto del jonrón de Jackson Melián en el octavo, fueron insuficientes para cambiar la historia de un juego que compromete las aspiraciones de los escualos en el Todos contra Todos.
Richard Garcés se acreditó el rescate aunque con muchos apuros debido al descontrol y par de errores de su infield, pero apretó el brazo con la casa llena para abanicar a Jackson Melián y culminar con la amenaza guaireña. El máximo taponero de la pelota venezolana necesitó 44 pitcheos para garantizar la cuarta victoria de Caribes en la semifinal.
Richard Paz se une a la tribu
La gerencia de Caribes de Anzoátegui se movió rápidamente y ante la posibilidad de una fractura de John Rodríguez, quien fue golpeado en su mano derecha, decidió llamar al utility de Navegantes del Magallanes Richard Paz para ocupar su lugar en el róster, uniéndose mañana mismo al equipo en Maracay.
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